Lo primero que los consumidores esperan de una empresa, es que haga todo lo posible por proteger el bienestar físico y la seguridad financiera de sus empleados y sus proveedores; lo segundo, que las empresas muten en lo posible para fabricar productos que ayuden a combatir la pandemia en cualquier forma posible; y finalmente, que se reduzcan precios o se ofrezcan gratuitamente artículos a personas vulnerables o en situación de riesgo.